El detergente natural de coco que tu piel adora.
No es fácil elaborar jabones que sean efectivos y a la vez todo lo respetuosos posible con la piel y el cuero cabelludo. Acabar con la grasa de la piel a nivel profundo sin resecarla ni dañarla no es, desde luego, una tarea fácil para quienes nos dedicamos a la cosmética si además pretendemos hacerlo de la forma más natural posible. Por suerte, en los últimos años la ciencia ha avanzado de tal manera que los agentes tensioactivos han revolucionado la cosmética natural al permitirle utilizar bases limpiadoras derivadas del azúcar, como el glucósido de coco, o como lo verás en las etiquetas, coco glucoside.
Si el glucósido de coco es tan alabado dentro de la cosmética natural es porque se trata de uno de los tensioactivos más suaves del mercado, reconocido como muy poco agresivo aunque eficaz, sin provocar apenas alergias.
Para fabricarlo se acude a la "química suave", partiendo de materias primas vegetales (y por lo tanto biodegradables), mezclando alcoholes de coco (aceite) con glucosa (azúcar de la fruta). Esta especial composición hace que sea aconsejable para cualquier tipo de piel, tanto la sensible como también la de los niños.
Además de limpiar siendo respetuoso, posee otras propiedades que lo convierten en un ingrediente muy aconsejable en jabones faciales, champús, etc. Es relipidisante, es decir, que restaura la capa hidrolipídica de la piel protegiéndola así de la deshidratación. Ayuda a la piel a tolerar otras mezclas y detergentes más fuertes, y potencia el efecto de otros ingredientes con los que suele ir combinado.
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// Clean & Shine, Love (Exfoliante facial)
En otras ocasiones os hemos hablado de los ingredientes que, además de exfoliar, hidratan al máximo la piel: aceite de jojoba, extracto de sargazo, vitaminas A, B1, B2 y C, caléndula, camomila, etc. Hoy os hemos presentado el "detergente" de la piel con el que contamos para nuestro exfoliante facial.
